Iglesia parroquial de San Saturnino

La iglesia parroquial de San Saturnino apenas conserva restos de su origen medieval, tan solo un par de ventanitas estrechas y adinteladas, en la base de la torre, cuyo arco de medio punto peraltado la emparentan con las iglesias del románico serrablés.

La mayor parte de la fábrica actual corresponde a la reforma llevada a cabo en el siglo XVII.

 

 

Es un edificio de época barroca, que consta de una única nave, con capillas laterales de escasa profundidad, y cabecera recta orientada al este. En el lado de la Epístola se ubican la sacristía, la torre y el pórtico. Está realizada en mampostería, con refuerzo de sillares en las esquinas, que en una buena parte del edificio se encuentra enfoscada con cemento.

La torre es de planta cuadrada, de un solo cuerpo, con vanos en arco rebajado para campanas en la parte superior y remate decorativo mediante pequeños pilares de sección cuadrada en cada una de las esquinas. El paramento norte de la torre, en su parte baja, presenta una ventana de factura tosca, cuya forma ligeramente de herradura ha llevado a asimilarla al estilo serrablés, aunque no puede afirmarse con seguridad dadas sus características. Se trata de una estrecha ventana aspillerada, rematada en su parte superior por un tosco arquillo con forma aproximada de herradura, configurado mediante dovelas muy largas y estrechas.

 

La entrada se abre en la cara norte, precedida de una lonja con empedrado tradicional. El interior consta de una nave con cinco capillas poco profundas a excepción de la que acoge la pila bautismal, en la base de la torre. La cabecera recta está precedida por un amplio arco triunfal y a los pies se levanta el coro. La techumbre es una sucesión de bóvedas de cañón con lunetas. Es muy interesante el retablo mayor, dedicado a San Pedro.


Bibliografía: 

Comarca Alto Gállego

SIPCA